La frase de vieja usanza, que significa arreglar algo con parches, sin ir a la cuestión de fondo, entra como “anillo al dedo” (otra del meta lenguaje argentino) a las intenciones que tiene el Consejo Federal en referencia al Torneo Federal Regional Amateur y las ligas del interior.
Comenzaron a delinear un protocolo “semi-profesional” para oficializar el retorno a los entrenamientos en la primera quincena de septiembre, aunque la fecha de retorno a la competencia se fue corriendo semana tras semana.
Según informó el sitio Ascenso del Interior, el ente hizo realidad la vuelta el 7 de septiembre. Sin descoordinar con las malas decisiones de AFA, aunque le agregaron “pimienta y sal” a gusto. Pasaron la vuelta de los torneos del interior de octubre a noviembre, de noviembre a diciembre, y ahora directamente a enero 2021.
En primera instancia el CF se ataja. Afirma que “siempre y cuando la pandemia y las autoridades lo permitan” habilitarán los campeonatos para el Regional Amateur y las ligas del interior. Eso sí, en estas participaciones las ligas no estarán obligadas y serán eximidas de sanciones si disponen lo contrario.
A partir de estas disposiciones dan otro salto hacia la inoperancia. En el caso de las ligas no se exigirán testeos, mientras que para el Torneo Regional se va a determinar más adelante (ni saben cómo), pero en caso de que se realicen estarían cubiertos por AFA (serían los serológicos).
En ese marco, sólo se respetarían los primeros puntos del protocolo sanitario “profesional”: higiene y distanciamientos obligatorios, no más de seis jugadores por sesión de entrenamiento, lavado continuo de manos y movilización a las prácticas de manera individual.
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En tanto, la Liga Regional de Río Cuarto acata órdenes del Consejo Federal de Fútbol. Si bien la Federación Cordobesa y algunas ligas del sur de la provincia elaboraron pequeños bocetos de protocolos sanitarios, desde el C.F “bajaron líneas” y nada arrancará hasta que no haya decisiones desde el ente madre.
Esas decisiones por el momento parecen erradas. Símbolos de la desorganización, intereses económicos y hechas a los empujones. Mucho más notorias si tenemos en cuenta en el contexto en que se están tomando: continuidad de contagios e inoperancia de la sociedad al acatamiento de órdenes.
El fútbol del interior quiere volver pero no sabe cómo. No está capacitado sanitariamente para llevar adelante protocolos que son exigidos en el ámbito profesional, ni tampoco quiere costear altos costos operativos.
Las Ligas amateurs del interior del país suspendieron sus temporadas oficiales en el 2020, aunque más de un centenar de clubes empuja por retornar para jugar Federal A y Regional Amateur.
El fútbol vernáculo quiere volver “atado con alambre”.
Por Iván Ortega - Redacción El Titular
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